Como hemos mencionado en otros posts, la innovación va más allá de crear algo completamente nuevo para el mundo. Mejorar un proceso dentro de tu empresa, siempre que aporte valor, también es hacer innovación. No se trata únicamente de desarrollar nuevos productos o servicios, sino también de optimizar los recursos existentes para generar un impacto significativo.
Cuando una empresa mejora un proceso —ya sea automatizando tareas, reduciendo costes o aumentando la eficiencia—, está generando valor y fortaleciendo su competitividad. Estas mejoras no solo impulsan la productividad, sino que también preparan a la organización para adaptarse a un entorno empresarial en constante cambio.
Un recurso clave para comprender cómo la innovación puede transformar procesos y generar impacto es el libro «Innovación Abierta» de Henry Chesbrough. Este texto profundiza en cómo las empresas pueden aprovechar tanto los recursos internos como externos para implementar mejoras y realizar cambios significativos.
¿Te interesa el tema y quieres descubrir cómo aumentar el valor de tu empresa a través de la innovación? ¡Hablemos!
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